Descubre consejos de salud para disfrutar de la mejor Navidad saludable, con trucos sencillos que te ayudarán en estas fiestas navideñas.
Es habitual que durante las fiestas navideñas tengamos la posibilidad de disfrutar de postres tradicionales que, a no ser que los elaboremos en casa, son difíciles de encontrar el resto del año. Entre los más característicos: turrones, polvorones, mazapanes o panes de Cádiz.
Pero también es común cometer ciertos excesos, con lo cual en enero, tras haber comprobado que hemos aumentado nuestro peso, vienen las lamentaciones y las consecuencias.
Come de todo, pero en pequeñas cantidades
Dado que en Navidad es común la elaboración de una grandísima variedad de recetas y postres propios de estas fiestas, es obvio que no debemos perder la oportunidad de poder disfrutar de ellas. Comer en pequeñas cantidades nos permitirá comer de todo, y probar de todo un poco.
Sigue una dieta equilibrada
Aunque en determinados días tengas comidas o cenas navideñas en las que te tiendas a exceder un poco, los siguientes días son ideales para depurar tu organismo y continuar manteniendo una dieta equilibrada.
No te olvides que comer cada día 5 raciones al día de frutas y verduras frescas es fundamental. También las infusiones y tés te ayudarán a desintoxicar y depurar tu cuerpo naturalmente.
Practica ejercicio físico regularmente
Te ayudará a mantenerte en forma, quemar grasa y las calorías de más que hayas consumido en los días anteriores, y además es ideal para evitar el típico estrés navideño, tan propio y característico de estas fiestas.
Basta con practicar cada día al menos 30 minutos de ejercicio, aunque lo ideal es llegar a la hora. Para quemar grasas, lo recomendable es escoger un buen ejercicio aeróbico, como correr o caminar. Y si lo practicas cinco veces al día, mejor que mejor.
Disfruta de una Navidad feliz
En Navidades, con las prisas por encontrar el mejor regalo o ir corriendo de un lado para el otro sin pararnos a descansar un poco, es habitual sentirnos estresados/as y ansiosos/as.
Para evitarlo, debes siempre tratar de darte un respiro, relajarte y disfrutar un poco de la magia de estas fiestas sin acordarnos de su sentido más consumista.Controlar la alimentación
Principalmente por tradición, los anfitriones acostumbran a llenar la mesa de cantidades de comida que sin duda en otra ocasión no alcanzarían tal magnitud. Estos días la mayoría de las personas se dejan llevar por la alegría, aparcando su preocupación por la dieta y el peso a un lado.
Principalmente por tradición, los anfitriones acostumbran a llenar la mesa de cantidades de comida que sin duda en otra ocasión no alcanzarían tal magnitud. Estos días la mayoría de las personas se dejan llevar por la alegría, aparcando su preocupación por la dieta y el peso a un lado.
El problema de los menús navideños, más allá de ser abundantes e interminables, es que están cargados de un alto grado de proteínas, grasas y toxinas que el cuerpo es incapaz de asimilar por norma general.
Cuidado con el alcohol
Abusar de la comida en estas fechas no es la 'única piedra' que nuestra salud se encuentra en el camino, y es que, cenas como la de Nochebuena, la de Nochevieja o la de Noche de Reyes fomentan el consumo excesivo de alcohol.
Abusar de la comida en estas fechas no es la 'única piedra' que nuestra salud se encuentra en el camino, y es que, cenas como la de Nochebuena, la de Nochevieja o la de Noche de Reyes fomentan el consumo excesivo de alcohol.
Esta ingesta tan poco habitual tiene efectos perniciosos a corto y largo plazo, sobre todo para el hígado y el páncreas.
Sin embargo, muchas personas no tienen la suficiente fuerza de voluntad para controlar su dieta o simplemente no se sienten capaces de rechazar la comida a sus seres queridos y no tienen más remedio que sucumbir a los excesos de la comida. Existen dos opciones: prevenir el aumento de peso siguiendo una dieta equilibrada los días antes de la Navidad y durante ella o, tras comprobar cómo las fiestas han cambiado nuestro cuerpo, llevar una dieta en función de esos cambios. En cualquiera de los dos casos, evita seguir alguna 'dieta milagro', no siempre son efectivas y perjudican a corto y largo plazo nuestra salud.
Generalmente bastará con volver a la dieta habitual y aumentar un poco la práctica de ejercicio de forma regular.